Cuando la circunstancia perfecta
No da contigo
Y decides crearla,
Es de la incongruencia de donde nace
La situación.
Se juzga a sí misma…
Y te juzgas a través de ella.
Sin embargo, la existencia
De una larva y de una mariposa
Al unísono,
Es tan necesaria como incoherente.
Es más,
Se trata de un hecho inevitable.
Pues…
¿Cuántas veces habremos caminado
Olvidando que tenemos alas
Impulsadas por un miedo pasado,
Inconsciente,
A que nos pisen?
Hace tiempo perdí la cuenta
De todas aquellas ocasiones en las que,
Reptando hasta lo alto
De un acantilado,
Me precipité en él.
Sin alas.
Pero es que pensé
Que podría volar…
Que una vez mariposa
No habría vuelta atrás.
¿Será que la esperanza
De un potencial daña?
¿Será que los miedos
Que encarnamos de circunstancias pasadas,
Protegen?
En realidad, ambas cuestiones
Encierran tanto peligro como salvación.
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