Busco el brillo
Y el horizonte.
Ambos retan
Mi vulnerabilidad
Valiente y asustada.
¿Dónde sucede el encuentro?
A cada paso que doy
El horizonte da otro,
Inasible
Nómada interna,
Me adentro en mi horizonte.
Ato mi latido
A su esencia,
La infinitud.
¿Y qué temo del horizonte?
En su persecución me expando
¿Tal vez una parte de mí
Teme ser pura entropía?
Termodinámica
Para hablar de vivir y morir.
Pero romperse en el expandirse
No significa dispersarse
Y que mis partes rotas se separen
En espacios distantes y desconocidos.
En la persecución del horizonte
Me expando porque me rompo,
Pero de entre los quiebres
Mana infinitud.
Infinitud que en mí
Se convierte en vida.
De mis heridas
Brotan mundos.
Infinitud entre mis quiebres,
Pegamento
Que me convierte en un ser unitario,
Pero amplio.
Pues ahora,
Si hay lugar metafísico
Este solo puede ser apertura.
Apertura infinita,
En tanto que infinitud de posibilidades.
¿Para qué necesito yo
Albergar infinitud?
No estoy segura,
Tal vez para conocer
Y reconocer el brillo.
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